La Santa Biblia es la Palabra Inmutable y
Viva de l'Eterno Dios
PERSEVERAD
“¡No os dejéis desviar! ¡Perseverad!
Nunca debéis cesar de orar para la derrota de todo aspecto de este
sistema satánico
que desaparecerá pero TODOS Mis servidores son instrumentales en su
caída. Todo lo que debéis hacer para
conseguirlo es orar para su destrucción total y absoluta para la vuelta de Mi Hijo, vuestro
Salvador,
Jesucristo,
a esta tierra para vencer todas las fuerzas de iniquidad. Poco a poco las fortalezas disminuyen y, poco
a poco, ellas hundirán y grande será su caída.
Todos están ahora encadenados, pero Mi Hijo viene
para romper las cadenas y permitir que sean liberados los cautiverios. Vosotros existáis para orar constantemente
que esas mismas cadenas sean rotas, para revelar al mundo toda la iniquidad para
que todos puedan juzgar y entonces escoger: su Dios Creador o Satanás.
¿Quieren ellos tanto su ilusión que
esconderán detrás de ella para evitar reconocer el pecado y el vacío en sus
vidas? ¿Mentirán a ellos mismos como les mienten Satanás y sus ministros en el gobierno y
en las iglesias? ¿Será tan fuerte
el confort de su realidad ilusoria que ellos lo cederán voluntariamente a Satanás para que siga su
estilo de vida corriente? Si es así,
ellos perecerán.
Ahora es el tiempo cuando todo el Género
Humano debe hacer decisiones: el Dios Creador o Satanás, la luz o las tinieblas, la vida o la
muerte.
Ningún escondrijo para el mundo entero. El tiempo del juicio está sobre TODOS. Los EE.UU. se han vendido como una puta en
las calles a Satanás, el
diablo, y han sido su proxeneta para aterrorizar y engatusar al resto
del género humano al cabo de ‘la calle polvorosa a la muerte’.
Huele ante Mí, el Eterno Dios, la iniquidad
de todo el género humano por haber arrodillado a todo género de ídolo, desde
los Creyentes Católicos con sus cruces y representaciones falsas de Mi Hijo hasta
los que se arrodillan en realidad ante ídolos de piedra sin vida, sin caridad,
sin poder.
Oíd a Mí, gentes de la tierra. No reprimiré más
de pronunciar sentencia sobre vosotros a menos que alejéis vuestras imágenes,
vuestros ídolos de todo género, de piedra y vivientes, a menos que Me adoréis, el Dios único y
verdadero, que da la vida, el Dios de Abraham, de Isaac y Jacob, el Dios que inició
TODA vida y quien, con una palabra, puede extinguir TODA vida de la faz de la
tierra. Orad a Mí para vuestro sustento, para
el aire que respiráis, el agua que bebéis, y los comestibles que coméis. Nada tiene valor si no tengáis esas
necesidades fundamentales. Las riquezas,
el prestigio y el poder son vanos si desaparezca todo.
Buscad la sencillez en Mí. Buscad el único Dios, más supremo que los otros
dioses hechos por el hombre, que puede protegeros en los tiempos horrorosos de
pena y dolor que os esperan.
No os confiad en gobiernos, médicos, curas, ministros de cualquier
género – TODOS os mienten, TODOS os dicen lo que
queréis oír, todos complacen vuestros deseos – por riquezas, por sexo, por
poder – sin satisfacerlos PORQUE os llenan con un deseo insatisfecho para MÁS,
MÁS, MÁS. Se conducen la gente, como
corderos a la matanza, para actuar de nuevo los tiempos de los gladiadores
cuando vosotros, gentes del mundo, seréis ese auditorio que pide la cabeza de personas
quienes se sacrificarán para daros vuestra fiesta romana del siglo veintiuno.
Vosotros, gentes del mundo, con sus apetitos
insatisfechos, atizados por Satanás,
el diablo, por sus servidores humanos y mitad humanos en los medios,
VIVIRÉIS un programa de realidad que no podréis apreciar porque los programas
mundiales de control del cerebro os habrán esclavizados tanto que seréis como
una persona de cartón sin cerebro, que existe solamente para completar el grupo
hasta que vosotros, también, seréis la víctima de deportes gladiadores y
sacrificiales que culminarán en vuestra muerte – una orgía para las
muchedumbres insensibles. Habréis
muertos como habéis vivido, sin sentido.
¡NO LO PERMITÁIS!
Vivid para Mí, el Dios Creador, y vivid
verdaderamente. Sentid cada momento de
vuestra vida, vida llevada para alabarMe
y agradecerMe, vuestro
Creador,
un Dios
que os ama, cuya esencia es amor.
No alabad vuestra familia, vuestro
automóvil, vuestra casa, o el gran dios, DINERO, sino alabadMe.
AlabadMe, y
vivid, o alabad todo salvo Yo, y experimentad como Satanás agota vuestra vida hasta que parezcáis
como los cielos azules sin vida que os dan ahora Satanás y sus colaboradores. Satanás, vuestro
dios, se entromete en el tiempo a tan punto que los hombres del tiempo
son ahora superfluos. Descubrid, fichas
engañadas y prescindibles en un tablero (a ellos), desde unos secuaces humanos de Satanás en una sala de
mandos en cualquier parte, lo que su deseo cotidiano les impulsa a ofreceros
como tiempo ‘aproximado’ para la estación en cualquier parte del mundo.
Mirad los cielos, gentes de la tierra. ¿Dónde están las estrellas, el sol y la luna
verdaderos? ¿Vivís como hormigas
pisoteadas, inconscientes totalmente de lo que ocurre en los cielos encima de
vosotros? Oíd los aviones que vuelen de
aquí para allá para crear las estelas químicas en el cielo. Sentid los pulsos electromagnéticos que se
apuntan a la gente mientras los aviones vuelen por lo alto. No es imaginación – se bombardean la gente con pulsos
electromagnéticos que desestabilizan el cuerpo y cambian como pensáis.
No recurráis a vuestros gobiernos para
respuestas porque ellos conspiran con Satanás para tender una trampa a vosotros. ¿Qué es su precio? Las riquezas, el poder y el prestigio. Ellos se servirán de sus propias naciones
como esclavos por el control del cerebro que ellos permiten, y os llevarán en
manada en campos de concentración que han construido para torturaros y mataros
para su gusto porque ellos han obedecido tantas veces a Satanás que tiene ahora posesión total de
ellos. No son más seres humanos salvo
que están aún hechos de carne y sangre.
Esta ES la REALIDAD de VUESTRO MUNDO
ILUSORIO, gentes de la tierra.
Reflexionad sobre esto y orad a Mí. Si
vosotros humilláis ante Mí, os oiré. Si vosotros
arrepintáis de vuestros pecados, YO, vuestro Dios Creador, os oiré. Deseo vuestro bien, no deseo el mal, pero YO NO OFREZCO
ni OFRECERÉ las riquezas o la prosperidad.
Yo
os ofrezco la vida, sino una vida de servicio alegre y libre a Mí.
ServidMe, el Dios Creador, y viviréis.”
sólo Jesucristo
es el camino para salir de este dilema.
Él es la única vía
de evasión.
Tenemos que
vivir bajo
Su Cuidado y
Protección.
La salvación por
otro medio, o en otro nombre,
No existe en
absoluto.
Dios exige la
Obediencia Completa.
Alaba al Señor.
Regresa pronto
Jesucristo.
Amen